En tan solo 10 años Herta Security se ha convertido en una de las principales empresas del sector de ciberseguridad e inteligencia artificial del mundo. La empresa ofrece Tecnologías de Reconocimiento Facial (TRF) y visión por computadora, especialmente en el sector de la seguridad. Sus soluciones tecnológicas se utilizan en estaciones de autobús, estadios, prisiones, casinos y proyectos de Safe and Smart City. Asimismo la TRF de Herta se integra con otras plataformas de gestión de vídeo, cámaras de videovigilancia, sensores y otros dispositivos de terceras empresas que registran vulneraciones de derechos humanos en contextos de alto riesgo.
La empresa nace en la Universidad Politécnica de Barcelona de la mano de Javier Rodríguez Saeta, actualmente administrador único y director general de la empresa. Según Javier Rodríguez: “Yo creía que en el futuro sería muy importante reconocer a personas que no quieren ser reconocidas, de forma automática y no colaborativa”. Con este leitmotiv, la empresa ha desarrollado tecnologías de alta precisión y procesamiento para identificar las caras de la población de forma masiva en tiempo real tanto en espacios público abiertos como control de accesos. En su web describe: “Cada día decenas de cámaras enfocan nuestras caras sin que ni siquiera nos demos cuenta”. Sus principales clientes son gobiernos, policías y otras empresas privadas.
La empresa opera a nivel global pero debido a las regulaciones europeas sobre protección de datos y privacidad, Herta ha intensificado sus operaciones en mercados de América Latina y Asia, incluyendo Colombia y Rusia. El CEO de la empresa considera que es imposible controlar lo que hacen los clientes con la tecnología que venden.